CONVERSATORIO CON GRACIELA TAQUINI
20 de septiembre - 20 hs
Sala de Conferencias "Eloísa Torrent de Vidal"
El próximo 20 de septiembre estará en el Museo de Bellas Artes “Dr. Juan R. Vidal” la renombrada artista y curadora argentina GRACIELA TAQUINI, quien compartirá con nuestros artistas locales una charla de intercambio y experiencias artísticas. Será a partir de las 19 hs, invitando especialmente a todos los artistas visuales de nuestra provincia. Se solicita confirmar asistencia al correo del Museo: museovidalctes@hotmal.com
Graciela Taquini ha desarrollado la mayor parte de su producción artística en el área del video experimental monocanal. Sus obras han recibido diferentes premios, entre ellos el Premio de la Asociación de Críticos de Arte de la Argentina al mejor guion, el Primer Premio del Festival Videobrasil, y en 2005 el Premio a la Acción Multimedia, Asociación Argentina de Críticos de Arte.1 Ha sido apodada "la tía del videoarte argentino" por su temprana participación e interés en dicha disciplina. En 2012 recibió la Premio Konex de Platino en Video Arte.2Es miembro de número de la Academia Nacional de Bellas Artes.
Su última producción La obra secreta (2018) con la actuación de Daniel Hendler, es un largometraje de ficción que entrelaza tres ejes narrativos: la figura y el pensamiento de Le Corbusier -máxima figura de la arquitectura moderna-, una exhaustiva visita guiada a una de sus obras más logradas y menos conocidas -la casa Curutchet de La Plata- y la extraña influencia que su figura ejerció sobre diversos aspectos de la vida del ignoto arquitecto de ficción, Elio Montes, encargado de las visitas guiadas de la casa Curutchet.
En el enlace https://youtu.be/I8C-Lp0jCUM un capítulo de la serie “Los visuales” del Canal Encuentro se puede acceder a una entrevista a la artista, y quien nos relata en primera persona su biografía:
Nací en Buenos Aires, Argentina, en un hogar de clase media. Mi familia, aunque argentina por tres generaciones era una mezcla de italianos de Génova, vascos y franceses. La tercera hija de César y Alcira, diez y quince años menor que mis hermanas.
Mi padre era abogado y docente, Amante de la poesía y el bel canto. Escribió sus memorias e hizo algunas obras de teatro que se representaron una sala teatral que el hizo construir en la escuela Comercial Nª 1, donde era rector.
En 1963 hice el curso de ingreso en la Facultad de Filosofía Letras de la Universidad de Buenos Aires. Ese año el Profesor Julio Payró había creado la carrera de Historia de las Artes. Desde 1964 a 1969 cursé esa carrera en una Universidad que en 1966 se vió afectada por la Noche de los Bastones largos que llevó a muchos docentes al exilio. Fuí testigo y padecí el cambio que se produjo.
Cuando me gradué, obtuve una beca del entonces Instituto de Cultura Hispánica para estudiar arte medieval en España. Mis amigos los hermanos Cocito, me hicieron una despedida donde reprodujeron en un tableaux vivant a LA PRIMAVERA de Botticelli. Su casa y su amistad contribuyeron a cultivar el arte, la música y la cultura.
En 1970/71 en la Universidad Central de Barcelona estudié Arte Paleocristiano con Pedro de Palol y Arte Gótico con Federic Pau Verrie a quien volví a ver en el año 2005. Pero el Medioevo quedó en Europa y volví a Buenos Aires donde me dediqué a la enseñanza de historia del arte.
En el año 1975 descubrí la obra del documentalista antropológico Jorge Prelorán, del que me convertí en una especialista, hasta finalmente publicar un libro. A partir de 1981 viaje por todo el país llevando las latas de sus películas en 16 mm. Y haciendo presentaciones.
La influencia de Prelorán fue muy importante para mi formación y mi futuro. A través del estudio de su obra me vinculé con los medios audiovisuales, estudié lenguaje cinematográfico y realicé acciones de gestión cultural.
En 1979 comienzo a trabajar en la Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires. Museos, espacios para la juventud y centros culturales fueron el ámbito donde desarrollé mi actividad. Mi vida como docente y como funcionaria se centra en instituciones estatales especialmente, escuelas y universidades públicas con el Estado como gestor de actividades culturales.
En El libro Curadores editado por el Rojas en 2005 cuento este perfil de profesión.
En 1980 a 1981 viví un año en los Estados Unidos. Trabajé como docente en el Bennington College de Vermont y realicé una Internship en el Smithsonian Institute de Washington.
A partir de 1984, junto con mi pareja, Alberto Farina, un crítico de cine nacido en Montevideo, reailzamos cortometrajes, por dos años conducimos un programa en Radio Municipal sobre cine, video y televisión e impulsamos el Bela Lugosi Club dedicado al cine fantástico.
Me dediqué a la animación cultural que fue desembocando a mediados de los ochenta en el video arte, gracias a la iniciativa de Remo Bianchedi y Elena Oliveras que me encargaron realizar programas cuando trabajaban en Artes Plásticas del Centro Cultural San Martín en 1986. Mi desempeño como curadora de artes electrónicas tuvo un desarrollo importante en las Bienales de Arte Joven, en el Auditorio del Museo de Arte Moderno y en muestras en el interior y el exterior.
En el año 2000 comienza mi actividad como curadora de artes visuales, y no solo de programas de video monocanal La primera muestra en ese sentido es Interferences en el CICV, Belfort, Francia. Ese encuentro consolidó una relación muy fluida con el la producción electrónica latinoamericana, especialmente con el Uruguay, país, al que me vinculo desde 1989, a traves de la Cinemateca Uruguaya y cultura de la Intendencia de Montevideo.
De los encuentros con artistas que se produjeron a partir del 2000 con el grupo Área 54 convocado por Sole Nasi, donde se reflexionaba sobre la cultura digital surgieron proyectos personales de curaduría.
Como artista realizo mi primera obra en 1988 a raíz de un Taller de Video Arte que da John Sturgeon, un becario de la Fullbright dictó en la Facultad de Arquitectura.
A partir del nuevo siglo comienzo a producir obras en forma más sostenida. Me fuí volcando al hacer una obra personal que cada vez está más sostenida. Soy una madura artista emergente.
